Autoridades encontraron el cuerpo de un niño abrazado a su perrito y en al costado su abuelita calcinados al interior de un auto, esto debido a los incendios que se han registrado en gran parte de California.
El niño de 13 años, identificado como Wyatt Tofte, murió el pasado martes cuando él, su madre y su abuela de 71 años salieron a buscar un refugio ante los impresionantes incendios que afectaron esta semana el poblado de Lyons, en el condado de Linn, Oregon.
El menor y su abuela no lograron sobrevivir, mientras que la mamá fue encontrada por el padre de Wyatt, su esposo, caminando en un sendero gravemente herida.
“Nuestra familia está devastada por la pérdida de nuestro bondadoso Wyatt, de 13 años, y su amada abuela Peggy en el Santiam Fire en la madrugada del 8 de septiembre”, señaló un comunicado revelado por CNN. “Tras una larga búsqueda, Wyatt fue encontrado en un auto con su perro en su regazo, pero desafortunadamente, no pudo escapar del fuego”.
La familia indicó que nunca se les avisó que debían evacuar, pues todavía el lunes los incendios estaban bastante lejos de su comunidad. Pero la madrugada del martes las llamas estaban prácticamente sobre ellos y eso causó que su intento de escape se diera de forma inesperada y sin éxito.
